El uso de herramientas de inteligencia artificial como Chat GPT, Midjourney o Dall-E ayudarán a transformar el trabajo de los profesionales en las áreas de la comunicación y las relaciones públicas.
¿Un robot nos reemplazará en el trabajo? Esa es una de las preguntas que más se han barajado con la masificación en el uso de herramientas de inteligencia artificial. En 2018 un análisis del Chartered Institute of Public Relations halló que 12% de las habilidades de los profesionales en el campo de las relaciones públicas podría ser complementado o reemplazado, y preveía que esta cifra crecería al 38% para el 2023.
El crecimiento en el uso de herramientas de inteligencia artificial está acelerando la transformación en la forma de trabajar de profesionales en distintas áreas. Las agencias de marketing y comunicación digital usan herramientas de inteligencia artificial para automatizar procesos y diseñar estrategias con la ayuda de los datos.
La inteligencia artificial se está usando en la segmentación de audiencias, la publicidad programática, el análisis de sentimientos, la personalización del contenido y el diseño gráfico y generación de video.
De acuerdo con un sondeo realizado por la firma Muck Rack, 61% de los profesionales dedicados a las relaciones públicas usa o está interesado en experimentar con herramientas de inteligencia artificial para alguno de sus procesos, ya sea para la redacción de propuestas de contenido, la realización de comunicados de prensa, investigación y planeación estratégica.
McKinsey Group vaticina que las dos áreas donde la inteligencia artificial puede tener mayor impacto son en el marketing y las ventas, cuyo valor podría alcanzar los 2.6 billones de dólares a escala global, seguido por la gestión de cadenas de suministro y la manufactura, con un valor de 2 billones de dólares.
Para Melissa Bugarini, cofundadora de la agencia de marketing Dragorini, “los programas de inteligencia artificial sirven para mejorar la eficiencia, efectividad y personalización de las iniciativas de marketing digital”.
“Si bien ya la veníamos utilizando en procesos que a lo mejor ni siquiera teníamos conciencia de que era inteligencia artificial, como por ejemplo las redes sociales, los algoritmos, los coches inteligentes, sistemas de reconocimiento facial, y con el lanzamiento del chat GPT, en noviembre de 2022, fue lo que detonó este boom”, dijo.
Bugarini es la encargada de diseñar estrategias de comunicación con ayuda de herramientas de inteligencia artificial. Cuenta con una especialización en Big Data e innovación empresarial. Además trabaja como consejera de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) y dirigió el Consejo Coordinador Empresarial de El Caribe para establecer un puente de comunicación con su trabajo profesional de la comunicación.
“Los programas de inteligencia artificial sirven para mejorar la eficiencia, efectividad y personalización de las iniciativas de marketing digital. Algunos ejemplos son la automatización, el análisis de datos masivos, la personalización (caso Aeroméxico) y en general mejorar los rendimientos de las campañas de marketing y por lo tanto la experiencia de usuario”.
Un ejemplo es el de la aerolínea Aeroméxico, que “envía un video personalizado a sus usuarios con un avatar donde les habla de manera personalizada y les dice cuántas millas de vuelo llevan (…) Todo eso se hace con herramientas de inteligencia artificial y de manera masiva, lo que permite la optimización y ser mucho más ágil con todos tus procesos”.
Además, el uso de estas herramientas permite que el desarrollo de estrategias se realice a través de una inteligencia basada en datos.
Según el Informe sobre el Futuro del Empleo 2023 del Foro Económico Mundial, 74.9% de las empresas considera implementar inteligencia artificial en los próximos cinco años, mientras que la adopción de analítica de big data (para el análisis de grandes volúmenes de datos) será adoptada por 80% de las empresas.
De acuerdo con Statista, se espera que el mercado global de inteligencia artificial generará 433,000 millones de dólares en ventas al cierre del 2023.
Aunque Bugarini concede que el proceso de incorporación de herramientas de inteligencia artificial en esta industria apenas se encuentra en una etapa temprana y falta acelerar la formación de profesionales con los conocimientos necesarios.
El uso de herramientas como ChatGPT para el desarrollo de textos automatizados y Midjourney o Dall-E para el desarrollo de imágenes automatizadas está en una etapa de adopción, pero a medida que estos sistemas se vuelvan más sofisticados permitirán eficientar procesos, aunque seguirán necesitando del conocimiento humano para poder lograr los objetivos deseados.
Por Antonio Becerril Romo ( El economista)